El automovilismo deportivo tiene un sitio reservado en el cine. No solo los periódicos, las revistas especializadas y la televisión han dedicado y dedican espacios al automovilismo deportivo. El cine ha sido también algunas veces instrumento de difusión de este deporte.
Varias son las películas que se han realizado sobre las carreras y sus pilotos, pero hay dos que en realidad transmiten el verdadero automovilismo deportivo.
LAS 24 HORAS DE LE MANS, dedicada a la famosa carrera de resistencia protagonizada por Steve McQueen, una película que mezcla imágenes de rodaje con las reales de la carrera de Le Mans.
GRAND PRIX, dedicada a los mono plazas (fórmula) y en la cual, como en la anterior, podemos ver a pilotos de aquellos años.
Estas dos películas deberían de formar parte de esas cosas que los aficionados tenemos con tanto cariño en nuestras casas.
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